Por Wilson Gómez Ramírez/Tomado de El Birán NY.
En una publicación anterior de ELBIRANNY publiqué un artículo en el
que reproduje una serie de expresiones y palabras extraídas de los
sectores populares barahoneros y que ha registrado la vida
socio-cultural de nuestro pueblo.
El “barahonerista” amigo, Virgilio Gautreaux, me conminó manu militari
para que hiciera una y otra publicaciones adicionales para completar,
en parte, este trabajo recreativo de una época en la que la
espontaneidad creativa marcaba el paso del diario vivir de los
barahoneros.
Cómo no recordar a los jóvenes de los años 70s que veían una doncella
con su cabeza enrolada, rolas grandes, y de inmediato le disparaban
expresión: ¡Oye, pero cómo puede llegar el agua a Savica!
Con esto le decían que tenía sobre su cabeza las tuberías del
acueducto razón por la cual el sector Savica, situado en la parte norte
de la ciudad, no podía recibir el servicio de agua potable.
Se le llamaba zulú al individuo de porte campesino y de poco
desenvolvimiento; sin embargo, el Diccionario de la Lengua Española dice
que este término tiene la siguiente definición: “Dícese del individuo de cierto pueblo de raza negra que habita en África austral”. En dicho diccionario aparecen como sinónimos de zulú: bárbaro, salvaje, bruto.
“Esta es la época de los condolios”, personas entradas en edad
llamaban así al período de la Semana Santa en relación con las
habichuelas con dulce, o sea que con la palabra condolio se identificaba
este plato de la culinaria dominicana.
“Le montaron una iglesia” con esta frase se quería decir que a una
persona que hizo algo en violación de los lineamientos de la familia fue
objeto de una dura le recriminación, ahora se diría que leyeron su
sermón.
Cuando un automóvil o motocicleta tenía dificultad para prender o
iniciar la marcha se decía: “oye, eso no arranca ni tirándolo en la
‘bajaita’ de los Mota”. Se identificaba así a la pendiente que está
localizada en la calle “Gral. Santiago Peguero”, entonces frente a la
Casa Mota, entidad comercial que negociaba con la exportación de café.
“Pa’lante como dice Maticlén”, nunca supimos quién era este
personaje, pero esta expresión era común en la gente de aquellos años y
ella constituía una viva exclamación de aliento, un abierto grito de
lucha.
“El tipo va de culemba”, así se le decía a la persona que se
beneficiaba de algo sin incurrir en pago, generalmente aquel que iba “de
bola”.
“¡Ajá! así se perdió la Julia”, esta expresión salía de manera rápida
y automática cuando una muchacha se agachaba para tomar algo que estaba
localizado en el suelo. Esto se relacionaba con la pérdida que entrañó
el naufragio del vapor La Julia.
En poblados de la zona costera de Barahona como El Arroyo, Bahoruco,
La Ciénaga y otros identificaban “la vileza” al reparto de alimentos
cocidos que se hacía en las escuelas en el marco del programa Alianza
para el Progreso, programa de ayuda económica, política y social para
América Latina puesto en práctica por el gobierno norteamericano
encabezado por John F. Kennedy, en 1961.
El diccionario define el término vileza como “Calidad de vil”, y una segunda acepción dice: “Acción o expresión indigna, torpe o infame”.
“Ta’pagando” fue una frase que acuñó un agradable personaje
barahonero que todos conocimos como Felito, pero cuyo nombre de pila era
Félix Tadeo Ledesma. Era un activo hombre del comercio ambulante que
alcanzó popularidad por ser generoso; así personas que tenían deudas con
él hacían abonos poco significativos y pero él valoraba el esfuerzo de
su deudor por cumplir, con su voz grave exclamaba: Ta´pagando”. De ahí
que cuando a alguien cumplía un determinado compromiso o deuda
cualquiera el que lo recibía manifestaba: “Como dice Felito:
Ta’pagando”.
En otra entrega ofreceremos más expresiones autóctonas de nuestro genuino Barahona.